Se ha hablado mucho sobre cómo actuar frente a una hemorragia nasal. Que si inclinar la cabeza para delante o llevarla hacia atrás, poner algodón en los orificios nasales, … Lo mejor es siempre poner la cabeza en posición recta o normal y apretar con los dedos la parte frontal de la nariz unos minutos, hasta que pare el sangrado.
Ahora con el buen tiempo, en verano, son normales los planes que incluyen un paseo en barco, sobre todo en municipios costeros como Dénia, Calpe, Gandía, Altea o Benidorm. Es común alquilar un barco y salir a plena mar a contemplar las bellas puestas de sol, pero ¡alerta! ¿Te mareas? Que nada estropee tus planes, aquí unos consejos para no marearte cuando vas en barco.
Como hemos explicado en anteriores post, la otorrinolaringología es la disciplina médica que se encarga de controlar las afecciones del oído, la nariz y la laringe. Estas partes del cuerpo, que en edad adulta requieren de atención periódica, alcanzan mayor importancia en la niñez puesto que problemas aparentemente inofensivos, mal curados pueden provocar lesiones importantes en edad adulta.
A menudo, nuestra voz no es causa de preocupación ya que es algo que no duele. No obstante, que no duela no significa que tengamos una voz sana. Existen muchas dolencias relacionadas con la voz, en su mayoría benignas pero, alguna de ellas puede complicarse y acabar siendo un problema mayor.
Durante el verano, paseamos por la calle y sentimos un calor sofocante, nos metemos en el coche y nos ponemos el aire acondicionado, bajamos al parquin y volvemos a sentir calor. Después, dentro de los comercios, se nos ponen los pelos de punta del frio nuevamente.
La acumulación de agua, la humedad, la contaminación ambiental, los cambios bruscos de temperatura, … Todo esto en verano puede pasarnos factura en los oídos.
Uno se da cuenta de éstos desordenes al levantarse por la mañana cansado, no relajado, con la boca seca por la respiración bucal nocturna. Aquí esta indicada la visita al otorrino, para que las cosas no vayan a más.
